Cuando una película tiene éxito en taquilla, es natural que su productora quiera aprovecharlo sacando alguna secuela, para ver si el tirón sigue funcionando. Lo que ya no es tan habitual es encontrarnos sagas y franquicias con ocho películas en su haber, en apenas década y media. Algo que solo está al alcance de algunos slashers de los 80, como Viernes 13 o Pesadilla en Elm Street, y que en nuestros tiempos se ha repetido solo en un par de ocasiones a nivel comercial. La primera es Harry Potter, la inmensamente conocida adaptación de los libros de J.K. Rowling, y la segunda es Saw, una saga totalmente diferente en la que la violencia, el suspense, el terror y el gore son los protagonistas. El éxito comercial del primer filme de esta franquicia tomó desprevenidos incluso a sus artífices, que sin embargo, supieron seguir dándole más mecha a la historia.
Y es que poco podían imaginar James Wan y Leigh Whannel que aquel desaforado producto de torture porn se iba a convertir en uno de los éxitos más importantes de toda la década, redefiniendo, junto a Hostel, una nueva manera de entender el terror, más sucio, más gore, más explícito. Cuando el director malayo y su compañero guionista tuvieron la idea para Saw, esta simplemente era un pequeño corto en el que eso sí, ya dejaban bien claras sus intenciones. Casi dos décadas después, con ambos asentados ya como estrellas dentro del género, la saga sigue siendo ineludible para los amantes del terror más extremo. Aquí te vamos a contar toda la trayectoria de la franquicia Saw y su evolución en estos años.
El cortometraje de Saw
La idea para esta historia surge en la mente de James Wan, que junto a Leigh Whannel, su colaborador habitual desde entonces, buscaba una fórmula impactante para llamar la atención con su corto, más como carta de presentación para los productores que como auténtico producto en sí. El corto estaba muy bien rodado y formulaba una premisa tan potente (la del tipo encerrado con un trampa en la cabeza que tiene que buscar la llave para liberarse) que llamó la atención de varios productores, permitiendo a Wan realizar el largometraje que se estrenaría solo un año después, en 2004. La estética del corto ya era muy parecida a la del filme original, con una imagen sucio, los tonos verdes y oscuros dominándolo todo, y por supuesto, la figura del siniestro Jigsaw ya haciendo de las suyas.
Primera película de Saw
Tras llamar la atención con el cortometraje, la productora Lions Gate permitió a Wan y Whannel producir una película completa manteniendo esa misma premisa y desarrollándola mucho más. El largometraje solo costó 1,2 millones de dólares, al utilizar a actores poco conocidos y tener apenas un par de localizaciones. Whannel se encargó del guion y Wan de la dirección, como en el corto. Aunque se nos cuenta un poco sobre la historia de Krammer, el asesino conocido como Jigsaw, tampoco se nos revela mucho sobre su identidad y su forma de trabajar. Las trampas y las imágenes fuertes de violencia extrema ya marcaban la diferencia en esta primera película, y serían parte imprescindible de la franquicia que se generó posteriormente, tras el éxito de esta primera entrega.
Éxito y secuelas
La película tuvo un éxito absoluto en las carteleras mundiales, seguramente en parte por toda la controversia y la polémica que la rodeaban por su violencia explícita en pantalla. Multiplicó por cien su presupuesto y se convirtió en uno de los productos de terror más vistos de aquel año, dando pie a una serie de secuelas que intentaban mantener la esencia de la primera. La segunda continuó con guion de Whannel, aunque ya sin Wan. En las posteriores, Lions Gate le dio la oportunidad a otros escritores y cineastas, que intentaron reformular la premisa original, que fue desgastándose con el tiempo. Sin embargo, los fans de la saga seguían abarrotando los cines en cada estreno, y eso generaba unos ingresos lo suficientemente interesantes como para que los productores siguieran alargando la saga por más películas, hasta que dejara de ser rentable.
Últimas entregas de Saw
Apareciendo casi a película por año desde el estreno de la primera, la saga ya comenzó a notar el desgaste en su quinta entrega. Lo cierto es que los intentos de los nuevos directores y guionistas a la hora de llevarla a un nuevo nivel no eran muy buenos, y finalmente, en 2010 se produjo Saw 3D, en un intento por revitalizar la franquicia, pero casi terminando con ella. La película no era demasiado buena, y tuvieron que pasar siete años para que apareciera la siguiente entrega, llama Jigsaw, donde se intentaba volver a los orígenes, con un asesino que imita el modus operandi de Jigsaw. La película tuvo buena aceptación por parte del público, superando los 100 millones de recaudación en todo el mundo, y ha dado pie a un nuevo intento por seguir adelante con la franquicia.
El futuro de la saga
Parece que todavía hay esperanzas para la saga Saw, después de que en estos últimos tres años, los productores originales hayan levantado un nuevo proyecto, dirigido por Darren Lynn Bousman, que estuvo en tres de las cuatro primeras entregas tras la cámara, y con el respaldo de Wan y Whannel. La película se llama Spiral: from the book of Jigsaw, y se sabe poco de ella, más allá de que está terminada, y protagonizada por Chris Rock, Max Minghella y Samuel L. Jackson, un reparto estelar sin duda alguna. La película tenía previsto estrenarse durante este mes de mayo, pero por la situación del Covid-19, seguramente el estreno se retrase unos meses. Los fans tienen muchas esperanzas puestas en esta entrega, ya que parece que por fin se volverá al origen auténtico de la saga.